La polilla no tiene la belleza de la mariposa.
Sin embargo, la vida le ha hecho más fuerte.

De invierno




En invernales horas, mirad a Carolina. 
Medio apelotonada, descansa en el sillón, 
envuelta con su abrigo de marta cibelina 
y no lejos del fuego que brilla en el salón. 

El fino angora blanco junto a ella se reclina, 
rozando con su hocico la falda de Aleçón, 
no lejos de las jarras de porcelana china 
que medio oculta un biombo de seda del Japón. 

Con sus sutiles filtros la invade un dulce sueño: 
entro, sin hacer ruido: dejo mi abrigo gris; 
voy a besar su rostro, rosado y halagüeño 

como una rosa roja que fuera flor de lis. 
Abre los ojos; mírame con su mirar risueño, 
y en tanto cae la nieve del cielo de París.

Rubén Darío

0 aleteos de polillas:

 
Free Website templateswww.seodesign.usFree Flash TemplatesRiad In FezFree joomla templatesAgence Web MarocMusic Videos OnlineFree Wordpress Themeswww.freethemes4all.comFree Blog TemplatesLast NewsFree CMS TemplatesFree CSS TemplatesSoccer Videos OnlineFree Wordpress ThemesFree CSS Templates Dreamweaver