Ha coincidido con un acto especial: mañana actúa en el Teatro Alameda y, si consigo entradas, disfrutaré de su inconfundible voz.
Por esta razón, y para ir haciéndome a la idea, me llevo su música a todas partes.
Es un gustazo, una gozada, -como diría aquel cocinero con tanto perejil -, escuchar sus canciones mientras una sucesión de caras, edificios antiguos y nuevos, y coches en un baile frenético pasan a mi lado. Quizás pase yo al lado de ellos, pero esa es la magia del autobús.
P.D. Feliz cumpleaños, hermanita!
1 aleteos de polillas:
Hola, veo que no te olvidas de tus amigas, una amiga que nunca te olvida, es una pena que el tiempo nos haya separado, Miriam.
Espero que podaís ir al concierto, lo que daría por estar con vosotras pero el tiempo y el mundo es así, Miriam. QUE OS LO PASEÍS BIEN!yo me quedaré aquí llorando desde las profundidades de la eternidad siempre recordando lo bien que me lo pasaba con vosotras... siempre os recordaré!
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